Pollo al curry

14 cocineros planean hacer esto
lacocinademinia.es
lacocinademinia.es @lacocinademinia
Santiago de Compostela

Se trata de la receta india más reconocida a nivel mundial.

Aunque, como en todo, hay múltiples formas de hacerla, desde la más sencilla, que es simplemente agregando curry al pollo, hasta la más compleja.

La mía queda en un punto intermedio, pues hago una crema de curry en la que se cocina el pollo. De esta forma coge todo el sabor.

Algunos estudios han demostrado que el consumo de currys picantes deja que el cuerpo libere endorfinas, teniendo una sensación de aliviar el dolor. Por ello, en algunas culturas se utiliza el curry picante como medicina para el dolor.

Curry lo hay en muchas culturas, tanto la india, la asiática, la árabe, países africanos,… y cada una tiene diferente forma de prepararlo, pues el curry no es una especie por si misma, sino que es un conjunto de especies, que combinadas en diferentes proporciones, dan sabores diferentes al curry o masala, según la definición.

Por lo general, dentro de la gastronomía india, el curry lleva jengibre, comino, cardamomo, guindilla, azafrán, nuez moscada, etc.

Como no siempre tenemos a nuestra disposición estas especias, preferimos comprar el curry ya hecho, pero ahí es donde se marca la diferencia.

Puede ser curry picante, curry de madras, curry japonés, … cada uno diferente.

En el caso de esta receta, he realizado yo mi propia mezcla de especias para hacer un curry que me guste, añadiéndole un poco de curry comprado, pues siempre nos acentúa algún sabor.

Leer más
Editar receta
Compartir

Ingredientes

  1. Harina para rebozar
  2. 8 cucharadas mantequilla
  3. 3 cebollas medianas peladas y finamente picadas
  4. 3 dientes ajo picados
  5. 1 cucharada jengibre fresco rallado
  6. 1/2 cucharadita comino molido
  7. 1/2 cucharadita pimienta de cayena molida
  8. 1 bote grande tomate triturado (normalmente es de 750 gr)
  9. 500 ml caldo de ave
  10. 1 vaso nata para cocinar
  11. 1 cucharada zumo de limón
  12. 1/2 vaso azúcar moreno
  13. 1 cucharada concentrado de tomate
  14. 1 cucharadita guindilla
  15. 1 cucharadita azafrán
  16. 1 pellizco nuez moscada
  17. al gusto Sal y pimienta

Pasos de la receta

  1. 1

    Cortamos las pechugas de pollo en cuadrados del tamaño de una nuez. Enharinamos ligeramente y ponemos a freír en la mantequilla. No pongamos muy fuerte el fuego porque tienden a quemarse. Doramos por cada lado y retiramos. Reservamos.

  2. 2

    Picamos muy finas las cebollas con el ajo.

    En caso de que se nos haya quedado corta la mantequilla, echamos un poco más para rehogar las cebollas a fuego moderado durante 10 minutos, hasta que se ablanden.

  3. 3

    Añadimos el jengibre y cocemos otros 4 minutos. Entonces añadimos el comino molido y la pimienta de cayena. Dejaremos otro minuto más.

  4. 4

    Añadimos el tomate triturado, el caldo de ave y las pechugas de pollo. Dejamos cocer a fuego suave durante unos 10 minutos.

  5. 5

    Agregamos el yogur, la nata, el zumo de limón, el azúcar, el tomate concentrado, la guindilla, el azafrán, la nuez moscada y el curry. Tapamos y dejamos cocer durante 30 minutos, removiendo de vez en cuando, hasta que la salsa haya espesado.

    Serviremos caliente acompañado de arroz basmati y, en caso de que os guste para suavizar el sabor del curry, con el mango chutney.

    Buen provecho

Reacciones

Cooksnaps

¿Has hecho esta receta? ¡Comparte una foto de tu creación!

Dibujo gris de una cámara y una sartén de cocina

Comentarios

Escrita por

lacocinademinia.es
lacocinademinia.es @lacocinademinia
Santiago de Compostela
Antes de nada os presento mi blog: http://www.lacocinademinia.es/ Con esta página no pretendo sumar otra más al amplio mundo de páginas de recetas, sino que quiero ir algo más allá, a través de recuerdos, de reflexiones, trucos, consejos, gustos, etc. Al fin y al cabo, el momento de la cocina es un momento para estar con uno mismo y da lugar a pensar en infinidad de cosas. Mucha de la gente que ha pasado por mi mesa a comer me ha comentado la idea de abrir un restaurante…¡¡¡¡noooo!!! ¡Qué forma de odiar la cocina!. Al igual que me han insinuado que me presente a un concurso de cocina. Al próximo que me diga que me pesente a un concurso de cocina lo mando al Gran Hermano. Sí que es cierto que tengo dos estados diferentes en la cocina: disfrutándola- normalmente fines de semana y cuando viene gente a comer a casa-, y odiándola- cuando tengo que pensar TOOOODOS los días el menú del día siguiente-. Y cuando digo pensar, no sólo es pensar en lo que hacer de comer, sino repasar mentalmente los ingredientes que tengo en el congelador, en la nevera, en la despensa, los que tendría que comprar en caso necesario, en qué momento puedo ir a comprar, si antes o después de recoger a los niños en el cole, o entre que van a una clase o a otra,… ¡¡Lo odio!! Pero no por ello odio cocinar. Empecé este proyecto como terapia y porque, como dice mi madre, soy un “culo inquieto”. Siempre tengo que tener algo en mente y si supone un reto para mí, mejor. Como terapia, me ha servido, y con creces. Estoy teniendo mejor acogida de lo que esperaba y además, tengo a la familia encantada. Todos los días comen algo diferente. No os creáis que las fotos me las saco de internet, no. Las fotos son hechas por mí de platos cocinados por mí, lo cual me obliga a cocinar variado, aunque bien es cierto que no es muy diferente de lo que cocinaba anteriormente.
Leer más